[Revisamos] Super Nintendo Classic Edition

32

Super Nintendo Classic Edition

8.5

Variedad de juegos

7.5/10

Calidad de juegos

9.5/10

Presentación

9.5/10

Diseño de consola

8.5/10

Atractivos extra

7.5/10

Pros

  • Excelente catálogo de juegos
  • Variedad de géneros
  • Alta durabilidad de consola
  • 2 mandos con cables largos
  • Varias opciones de resolución

Cons

  • Muy pocos juegos
  • Puertita delantera es endeble
  • Faltó botón extra en mandos

La Super Nintendo es una de mis consolas favoritas de toda la vida, un aparato al que estoy seguro mucha gente, como yo, le tiene un montón de nostalgia. De hecho, para varios gamers se trata de un sistema que representa a Nintendo en su mejor momento, una época en la que parecían ser los reyes de los videojuegos. Ni siquiera Sega, con su famoso Génesis, parecía ser capaz de hacerle una buena competencia; sí, dicha consola apelaba mejor a los gustos de los adolescentes, pero hay que admitir que la SNES tenía una biblioteca más variada y con juegos que han resistido mucho mejor el paso del tiempo.

Es por todo esto que estaba aun más emocionado por conseguir y jugar mi Super Nintendo Classic Edition, que incluso la NES que salió el año pasado. ¿21 juegos clásicos, incluyendo a Star Fox 2, título que nunca llegó a estrenarse en la consola original, todos en resolución HD y en diferentes formatos de visualización? ¡Sí, por favor! Y aunque esta nueva SNES no ha corregido absolutamente todos los errores cometidos por la NES hace casi un año, igual se trata de un excelente producto coleccionable, la mini consola perfecta para los fanáticos de la Gran N, y de la era de los 16 bits.

Yo crecí principalmente con el Nintendo 64, pero la Super Nintendo fue, de todas maneras, parte importante de mi infancia. Y admito que jugar cualquiera de los títulos incluidos en la Mini realmente se siente como regresar a aquella época; ninguna emulación, ninguna Consola Virtual y ningún método de piratería será capaz de recrear esta experiencia de manera tan fidedigna. Sí, supongo que la SNES Classic no es nada del otro mundo si se le analiza de manera objetiva, pero a través de una perspectiva nostálgica, es toda una maravilla. Aquellos que nunca hayan probado un Super Nintendo o que no hayan crecido con este sistema, tendrán una experiencia muy rica jugándolo, pero no será lo mismo.

A diferencia del NES Mini, que vino con 30 juegos incluidos, la SNES Mini solo cuenta con 21. Es claro que Nintendo priorizó la calidad por sobre la cantidad; sí, no son muchos juegos los que vienen con la Super Nintendo Classic Edition, pero todos son títulos verdaderamente grandiosos, clásicos que muchos recordarán de sus años mozos, y que merecen ser revividos tanto para los gamers experimentados, como para las nuevas generaciones. Aquí va la lista de juegos:

– Contra III: The Alien Wars

– Donkey Kong Country

– EarthBound

– Final Fantasy III

– F-ZERO

– Kirby Super Star

– Kirby’s Dream Course

– The Legend of Zelda: A Link to the Past

– Mega Man X

– Secret of Mana

– Star Fox

– Star Fox 2

– Street Fighter II Turbo: Hyper Fighting

– Super Castlevania IV

– Super Ghouls ‘n Ghosts

– Super Mario Kart

– Super Mario RPG: Legend of the Seven Stars

– Super Mario World

– Super Metroid

– Super Punch-Out!!

– Yoshi’s Island

Realmente no encuentro ningún título deficiente o decepcionante en la lista. Desde RPGs como Earthbound o Super Mario RPG, hasta títulos de carreras como F-Zero o Super Mario Kart, y clásicos de la aventura como Super Mario World, la biblioteca de juegos de la SNES Mini es muy variada, y debería otorgarle horas de diversión a cualquier gamer. Además, la presentación de cada juego es prácticamente perfecta: todos están en HD, pueden ser jugados en formatos 16:9 (rectangular, como las TV modernas), 4:3 (cuadrado, como el SNES original), pixel-perfect (más fiel a los títulos originales, imposible), o incluso con un filtro tipo CRT para que uno regrese veinte años atrás y sienta que está jugando en un televisor antiguo.

Adicionalmente, los menús para escoger los juegos están atractivamente diseñados (se navegan muy bien, y la música estilo 16 bit es excelente), y están lleno de easter eggs que seguro serán muy divertidos de encontrar. Cada juego cuenta con su portada original (como las cajas) y una versión digital de sus respectivos manuales.

Al igual que la NES, el Super Nintendo Classic Edition cuenta con algunas características extras que hacen de la experiencia de utilizarlo una un poco más manejable. Por ejemplo, se puede guardar en cualquier momento de cualquier juego, por lo que no es necesario pasar niveles enteros de una, ni comenzarlos desde el principio cuando uno muere. También hay una opción de Retroceso, para regresar unos segundos en un juego si es que sientes que te has atracado, estás a punto de morir, o has muerto; la cantidad de tiempo que uno puede retroceder depende del juego (el tiempo es mayor en cualquiera de los RPGs, por ejemplo). Lo bueno de todas estas características es que son opcionales; sirven para ayudar a los gamers modernos o menos experimentados, pero no tienen que ser usadas si quieres jugar estos títulos a la antigua.

¡Y qué títulos! Sí, algunos juegos no han envejecido igual de bien que otros, pero en general, se trata de una biblioteca de juegos magnífica. Super Mario Kart demuestra por qué es que la franquicia ha durado tanto tiempo; se trata de un excelente juego de carreras, a pesar de que sus gráficas pueden resultar algo confusas por momentos. F-Zero es velocidad pura, y Mega Man X y Super Ghouls ‘n Ghosts son posiblemente los juegos más difíciles de la lista. Obviamente hay obras maestras, también; títulos como Super Mario World o The Legend of Zelda: A Link to the Past no tienen pierde.

Y por supuesto, no podemos olvidarnos de Star Fox 2, uno de los juegos perdidos más famosos de la historia de Nintendo, y quizás el mayor atractivo de la SNES Mini. Obviamente no voy a redactar un análisis entero del título acá; todo lo que diré es que se trata de una excelente entrega de la franquicia, un juego que debe ser evaluado bajo sus propios méritos, y considerando que fue desarrollado en 1995. No, no puede ser comparado a juegos más modernos de la saga, pero considerando que mejora muchos de los aspectos más limitantes de la primera entrega, dándole más libertad al jugador, e incluso utilizando características que eventualmente serían introducidas, por primera vez, en Star Fox 64, definitivamente se trata de un juego muy sorprendente para el Super Nintendo. Toda una joyita.

Ahora bien, hay que admitir también que hubiera sido bueno tener un mayor catálogo de juegos en la SNES Mini. Después de todo, considerando que salieron más de 700 juegos para la consola original, el tener únicamente 21 en este nuevo formato es extremadamente limitante. Obviamente, de esos 700, más de la mitad probablamente ni valga la pena jugar, pero los demás… En todo caso, hay juegos que se extrañan, como los Donkey Kong Country 2 y 3, y más grave, el fantástico Chrono Trigger, uno de los mejores RPGs de toda la historia. Sé que no fueron incluidos por un tema de derechos, probablemente, pero hubiera sido increíble tenerlos, ¿no? Uno puede soñar

En términos de diseño, la SNES Classic Edition es igualita de un Super Nintendo original… solo que más pequeña, obviamente. Es ligera pero se siente sólida, y representa un gran homenaje a una de las consolas más exitosas y famosas de la Gran N. Esto no quiere decir que no tenga fallas, no obstante; la más grave es la pequeña puertita que tiene al frente, que se tiene que abrir para poder conectar los controles. Es difícil de abrir y cerrar, y se siente como un pedazo de plástico barato que podría romperse fácilmente. Habrá que tratara con cuidado.

Felizmente, Nintendo se dio cuenta de algunos de los mayores defectos de la NES Classic Edition, y los corrigió en esta nueva consola. Por ejemplo, la SNES Classic viene con DOS controles, por lo que uno puede jugar títulos mulitjugador, como Super Mario Kart o Street Fighter, desde el arranque. Además, los cables son más largos, por lo que, aunque igual recomendaría utilizar algún tipo de extensión para estar más cómodos, al menos no son igual de idiotamente cortos que los cables de los mandos de la NES Mini. Los controles en sí son tal cual los de un SNES original… o sea, e gran calidad, y muy cómodos.

Desgraciadamente, para resetar el sistema, al igual que con la NES Mini, es necesario pararse y aprietar el botón de Reset. Lo mismo para retroceder en el juego. Se trata de una inconveniencia estúpida y totalmente innecesaria; hubiera podido incluir un botón adicional en el mando y el problema se hubiese arreglado. A ver si para la Nintendo 64 Classic Edition (¿la llegarán a hacer?) solucionan esto.

A pesar de algunos defectos con los que todavía cuenta, la Super Nintendo Classic Edition es una consola nostálgica espectacular, el sistema perfecto para transportarse de regreso a principios de los años 90, y disfrutar de títulos de la mejor manera posible, tanto a nivel de gameplay, como a nivel visual. Sí, el catálogo de juegos es limitado, y sí, el aparato todavía cuenta con alguna inconveniencias, pero me atrevería a decir que vale la pena conseguir incluso solo para poder jugar Star Fox 2. En pocas palabras, al igual que la NES Mini, la Super Nintendo Mini es una consola perfecta para los fanáticos acérrimos de la Gran N… pero posiblemente, para nadie más.

Comentarios
Loading...