Adrenaline Rush - Miami Drive
Pros
- Entretenido y adictivo
- Gráficas coloridas
- Estética retro
- Controles súper simples
- Sistema de upgrades
Cons
- Bastante repetitivo
- Corta duración
- Pistas se parecen entre sí
- ¿Por qué se lleva a cabo en los 70s?
Siempre me resulta algo complicado el juego un título para la Nintendo Switch que comenzó como un juego para móviles. Después de todo, este tipo de juegos son bastante más baratos que las propuestas AAA para la consola, y en términos generales, no pueden ser juzgados bajo los mismos parámetros. Son títulos, después de todo, hechos para un público distinto, o en todo caso, con un objetivo diferente: acá no hay que atravesar niveles gigantes, ni tratar de meterse de lleno en una historia profunda o complicada. Son propuestas, más bien, que se juegan en sesiones cortas, y que sirven para distraer por unos cuantos minutos, incluso, como descansando de juegos más complejos.
Y si uno toma eso en consideración, “Adrenaline Rush – Miami Drive” no está del todo mal. Después de todo, el juego se controla bien, tiene gráficas decentes y resulta divertido, como se deben imaginar, en sesiones de juego bastante cortas. Y además, se encuentra en oferta —hasta fines de abril del 2020—, por lo que si no quieren gastar mucho dinero que digamos, no se trata de una mala opción. Pero a la vez, no puedo evitar sentir que hay mejores opciones —y muy similares— en la eShop de la Nintendo Switch, que a pesar de costar un poquito más, podrían resultar ser más satisfactorias. No me tomen a mal —la pasé bien con “Adrenaline Rush – Miami Drive”, pero definitivamente se trata de una propuesta extremadamente limitada, incluso para estándares de las producciones indie.
La premisa es extremadamente simple. “Adrenaline Rush – Miami Drive” es un endless runner con estética setentera —por alguna razón—, en donde uno controla a un carro yendo por diferentes pistas, acelerando de manera automática. El juego nos va presentando distintas misiones, cada una de ellas compuestas por tres objetivos que hay que cumplir —estos pueden ser desde chocar de costado a una cierta cantidad de carros, hasta utilizar ciertos ítems. Además, el juego cuenta con un sistema de upgrades, así como diferentes ítems que se pueden ir comprando para que el cumplir los objetivos no resulta muy difícil. ¡Y eso es todo!
A nivel de controles , “Adrenaline Rush – Miami Drive” es bastante simple, pero funciona. Como mencioné líneas arriba, el carro avanza automáticamente, por lo que uno solo se tiene que preocupar por moverlo horizontalmente con el stick izquierdo, para que vaya cambiando de carriles. Cuando uno encuentra ítems en la pista, los utiliza automáticamente, además, por lo que en términos de controles… no hay mucho más que se pueda usar. Es ahí donde uno se da cuenta rápidamente que “Adrenaline Rush – Miami Drive” comenzó como un juego para móviles —solo que ahora, en vez de tener controles touch súper torpes en una pantalla enana, tenemos controles más tradiciones y precisos.
SI “Adrenaline Rush – Miami Drive” funciona, es porque termina siendo una experiencia extremadamente adictiva y sólida a nivel de gameplay. Objetivos como el chocar los autos no son particularmente difíciles, pero resulta satisfactorios —solo recuerden que uno debe chocarlos de costado, ya que si lo hacen por atrás, el nivel termina. Además, uno tiene que ir recolectando la mayor cantidad de monedas posible a lo largo de las pistas, para acumular puntaje y utilizarlas para comprarle upgrades al carro, conseguir ítems, o por qué no, desbloquear nuevos vehículos. No es un sistema de compras particularmente novedoso, pero funciona para efectos de esta experiencia en general. Y hey, ¡al menos no hay microtransacciones!
No obstante, precisamente como no hay mucho más que disfrutar en el juego, la experiencia, por más adictiva que sea, termina siendo bastante repetitiva. La recolección de ítems, así como los diferentes objetivos, sirven como motivación para que uno siga jugando, pero como las pistas no varían mucho que digamos, y los ítems tampoco es que sean utilizados en grandes cantidades, luego de un par de horas, uno se aburre rápidamente. Sí, el utilizar el escudo para destruir carros sin parar, o el usar el imán para atraer todas las monedas cercanas puede resultar muy satisfactorio, pero momentos como esos no son tan frecuentes, y eventualmente también terminan por aburrir. “Adrenaline Rush – Miami Drive” no es un juego profundo o particularmente largo, y por ende, debería jugarse muy de cuando en cuando, y en sesiones rápidas y furiosas.
A nivel técnico, “Adrenaline Rush – Miami Drive” no está tan mal que digamos. La estética retro y el estilo de arte tipo 70s son algo gratuitos —resultan visualmente atractivos y le otorgan algo de estilo al juego, pero no tienen una razón de ser. Nada en el gameplay o en la experiencia en general está relacionado con el hecho de que el juego se lleve a cabo en los 70s, así que asumo que decidieron darle ese estilo solo para que no se parezca a sus competidores. La música es alegre y pegajosa, en todo caso, y como es un título que comenzó en celulares, “Adrenaline Rush – Miami Drive” corre a la perfección en ambos modos de la Nintendo Switch.
“Adrenaline Rush – Miami Drive” es una experiencia aceptable —un juego cumplidor que sirve para distraer por unos minutos, pero que no logra destacar de entre los varios endless runners que hay disponibles en la eShop de la Nintendo Switch. Gráficamente no está mal, y se controla de manera precisa y extremadamente sencilla, pero el gameplay repetitivo, la poca variedad de pistas, y las misiones que se parecen mucho entre sí definitivamente juegan en su contra. Si encuentran a “Adrenaline Rush – Miami Drive” en oferta, vale la pena que lo consigan, especialmente si están en busca de algo ligero y poco pretencioso. Si no, mejor ni se animen; no es que se vayan a perder de mucho.