G-Darius HD – Nintendo Switch (Análisis)

Pareciera que es la temporada de renacimientos de los arcades japoneses. Pues, en esta oportunidad veremos nada más ni nada menos que uno de los clásicos de los Shoot ‘em up adaptado para Nintendo Switch: G-Darius HD, una aventura de naves y disparos que no podía faltar en las “maquinitas” de los 90. Esta entrega llega a nosotros gracias a Taito Corporation e ININ Games, quienes para darle incluso un mayor sabor a nostalgia nos presentan una edición física, ideal para los coleccionistas más leales de los juegos retro.

Esta versión disponible para Switch consta de 2 entregas en una, el G-Darius original de 1997 y un port bastante fiel como remasterización HD titulado G-Darius HD. Para tener un contexto sobre lo que significó este clásico desde su primer lanzamiento hace más de 20 años hablaremos sobre su apartado gráfico. G-Darius surgió como el primer juego de la serie totalmente en 3D, para ello usaron modelos simples con low poly que en definitiva fueron bastante llamativos en la época. Para que se hagan una idea, este tipo de modelos 3D son similares a los vistos a Super Mario 64, pero a diferencia de este último, los gráficos se nos presentan bastante “pixelados” por la resolución del arcade de la época.

En cuanto a la remasterización, se nota bastante el upgrade de gráficos sobre el original. Se aplicó un escalado suave de 32 bits, pero sin dejar de seguir los lineamientos base de la primera entrega. Tal es la fidelidad de esta nueva edición que aún se siente un pequeño retraso de frames cuando nos enfrentamos a varios enemigos. Sonará curioso esto último pero hay que resaltar que la versión HD es prácticamente la misma que el original, solo que con gráficos más pulidos. Si eres de los que esperaban un cambio de panorama o diferencias más allá de la resolución pues te adelantamos que no es lo que pensabas. La experiencia que te da este título es nostalgia pura, nos permite revivir el clásico de las naves y disparos además de ofrecer una percepción bastante pulida de cómo visualizábamos este juego en ese entonces –en aquellas épocas cuando el 3D era una cosa futurista–. Puesto que con las resoluciones de posteriores consolas es inevitable darse cuenta de la baja resolución de gráficos que traía la versión original.

Ya habiendo aclarado que la única diferencia es el escalado de sprites a modelos 3D más notorios, pasaremos a los otros aspectos. En ambas entregas se nos presentan interfaces bastante coloridas con elementos fáciles de identificar como los característicos proyectiles y power-up que aparecerán en pantalla. De la misma forma, tendremos diseños bastante memorables en cuanto a los enemigos –los cuales tienen una clara inspiración marítima–, sobretodo en los jefes que resaltan por sus llamativas paletas de colores y detalles que se aprecian mucho mejor en la versión HD. Además, en la pantalla del juego se nos muestran de forma intuitiva bastantes elementos que aportan información al jugador, como la salud del jefe, el nivel de las armas y del escudo, entre otros.

Por otro lado, en el apartado sonoro no se hizo ningún cambio entre las 2 ediciones. En ambas se pueden apreciar los intensos temas de fantasía compuestos por el famoso Hisayoshi Ogura, quien fue miembro de la banda Zuntata de Taito Corporation, un veterano de la saga Darius. Las músicas, que tienen una clara influencia de la electrónica experimental, le dan ese toque aventuresco que es necesario en niveles tranquilos, para variar a melodías más intensas en los jefes. Aunque puede que a veces la música pase desapercibida por la cantidad de disparos y enemigos que aparecen, logra su cometido: combinar con el escenario dando una propuesta inmersiva para cada nivel.

La historia de G-Darius gira alrededor de un grupo de monstruosos enemigos alienígenas robotizados que tendremos que derrotar para asegurar la supervivencia de la raza humana al mando del icónico Silver Hawk en esta distopía espacial. Realmente este concepto ya ha sido empleado muchas veces en otros juegos de naves. De la misma forma, las mecánicas clásicas de los Shoot ‘em up y Bullet Hell son bastante conocidas (hordas de enemigos y balas por doquier), así que profundizaremos en las características más representativas de este juego, las cuales impulsaron su gran popularidad en esa época.

Como ya se mencionó, una de los principales atractivos fue el salto al 3D, pero no fue esa la única inclusión que se dio en la saga de Darius con este juego. Otra de las funcionalidades más llamativas fue la mecánica de “capturar enemigos”. Para esto se utilizan las “Capture Ball”, con las que podrás atrapar a las naves enemigas o incluso algunos jefes cuando estén débiles –al puro estilo de Pokémon–. Úsalo para acoplarte armas o escudos, ¡e incluso para que luchen a tu lado! De esta forma se evita la monótona rutina de solo disparar, lo que suele ser el talón de Aquiles en muchos juegos de naves. Además, podrás ver qué enemigos has capturado en la galería de captura o bestiario –misma Pokédex–.

Asímismo, otra de las características más resaltantes es la posibilidad de elegir entre más de un camino en medio de la aventura. En total son 15 etapas, pero cada una de estas cuenta con 2 caminos según la dirección que tomes. Puedes ir por el cielo o por el mar, cada uno con una escenografía única (también en 3D) que te impulsa a pasar el juego más de una vez. Como dato adicional, vale la pena mencionar que se puede invocar un potente rayo cargado que destruye pequeños enemigos a su paso. Una mecánica bastante interesante a la que se le saca mayor provecho en los “duelos de rayos”, los cuales se dan cuando el jefe rival también carga un rayo al mismo tiempo. Estos enfrentamientos se dan al puro estilo de Dragon Ball, apretando el botón de disparo para incrementar la potencia, la cuál también es afectada por los enemigos que hayas capturado.

En lo que respecta a los controles, estos se sienten con un delay mínimo que en sí no afecta tanto la jugabilidad, pero es algo que pudieron haber modificado en la versión remasterizada. De la misma forma para la leve desaceleración que se da en algunos instantes, lo cuál facilita algunos tramos del juego pero evidentemente no luce como algo hecho a propósito. Aún así, algo bastante positivo en este apartado es la posibilidad de cambiar absolutamente todos los controles, incluso se pueden activar o desactivar mejoras, ocultar opciones, entre muchas otras configuraciones que te dan una experiencia muy personalizada para este género.

En conclusión, esta entrega nos ofrece una experiencia digna de uno de los mejores arcades de disparos, el cuál incluso fue pionero del 3D en su época. La mejora se dio únicamente en los gráficos, dejando un título bastante fiel al original –quizá demasiado–. Este juego es recomendable principalmente para los amantes de los juegos retro. Debido a que para los que no son tan aficionados al género, los modelos anticuados y el pequeño delay que a veces se da pueden no ser algo tan agradable.

Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por ININ Games.