Monark – Nintendo Switch (Análisis)

No es de sorprender que anualmente salgan al mercado una cantidad más que aceptable de JRPGs. Siempre se ha tratado de refinar y mejorar el concepto, pasando entre los clásicos juegos por turnos, los Action RPG e incluso los RPG con desplazamiento en el entorno. Es así que se han visto experimentos bastante sorprendentes, tanto positiva como negativamente. El intentar innovar en un campo donde prácticamente ya no se puede ir más allá es algo que constantemente tiene ocupados a los diferentes estudios y desarrolladoras de videojuegos. Hace unos meses atrás, se anunció que ex-trabajadores de la serie Shin Megami Tensei estaban trabajando en un nuevo proyecto en la desarrolladora Furyuu.

Ya ha pasado el tiempo y el juego que nos importa para la review de hoy, Monark, ya se encuentra próximo a su estreno. Un juego desarrollado por la empresa Furyuu y publicado en esta ocasión por NIS America en occidente. Acompáñanos en esta reseña para descubrir qué es lo que nos presenta Monark en la mesa y si vale la pena la espera para este nuevo título de parte de ex-trabajadores de Atlus en este nuevo viaje.

Principalmente, Monark es un JRPG con desplazamiento en tiempo real, similar a cosas como Valkyria Chronicles o X-Com. En este caso, dentro de lo que se conoce como “The Otherworld” nos embarcaremos en un viaje por salvar a la academia Shin Mikado de una niebla que ha cubierto todo el terreno de la escuela. Esta niebla causa locura en aquellos que se encuentren dentro, convirtiéndolos en Unsettled. Con el fin de reducir la niebla y descubrir lo que esta sucediendo, nuestro protagonista, quien tiene amnesia, se adentrará en los terrenos de la escuela para evitar que esta siga expandiéndose. Junto a nosotros tendremos algunos aliados, los cuales han formado pactos con demonios conocidos como Monark, los cuales representan a cada uno de los pecados capitales. A nosotros nos ayudará un Monark conocido como Vanitas, quien representa a la Vanidad.

A simple vista puede parecer que la historia es algo que se podría esperar de un JRPG basado en japón. Un joven con amnesia en una escuela que se debe enfrentar a demonios y enemigos de fantasía con el fin de proteger a los demás. Hasta cierto punto puede parecer algo cliché, pero sorprendentemente la historia funciona bastante bien sentando sus bases en las primeras horas de juego. Conforme se avance en el desarrollo de esta se irán añadiendo más miembros a nuestra party. Llegado cierto punto tendremos que enfrentarnos con otras personas que han hecho un pacto con estos Monark. Para derrotarlos es necesario destruir unos cristales conocidos como Ideals que se encuentras dispersos en the Otherworld. Una vez destruidos, estas personas pierden sus poderes y caen en un estado de coma hasta que recuperen la capacidad cognitiva nuevamente.

La historia toca temas sobre la psicología y la mente humana. El como existe otro lugar que se encuentra alejado de la percepción humana al cual solo se puede ingresar si se ha hecho un pacto con un Monark. Debido a la temática de los pecados capitales, cada enemigo representa estos papeles, los cuales fueron tentados debido a las circunstancias en las que se encontraban. Estos temas no son tan novedosos y sí, recuerdan mucho a la serie Shin Megami Tensei y Persona respectivamente. No es una sorpresa debido a que muchos trabajadores de dichas franquicias estuvieron encargados del desarrollo del juego. Nuestro árbol de habilidades se irá liberando poco a poco conforme subamos de nivel con los puntos de espíritu que consigamos en batallas y explorando.

Respecto a la exploración y las locaciones dentro del juego estas pueden volverse muy repetitivas. Al estar encerrados dentro de una escuela los ambientes son prácticamente idénticas, cambiando solamente los lugares de las aulas y colocando distintos puzzles que debemos resolver para seguir avanzando. Básicamente la temática es la misma durante la mayor parte del juego. Entrar en la niebla, destruir los distintos Ideal y enfrentarnos al jefe de la zona. El combate si bien tiene muchas variaciones donde siempre se juega con arriesgar o no, al ser todo siempre similar vuelve la experiencia realmente monótona. Los diseños de los enemigos normales no ayudan mucho, se sienten muy genéricos debido a que son todos los mismos salvo que con más nivel y más armadura.

Visualmente el juego tampoco destaca demasiado. Al igual como sucedió con Calígula Effect, la gente de FuRyuu debe cambiar el motor gráfico que están usando. Se siente muy desfasado para la época actual. Sí, funciona pero se siente viejo y barato. Tanto los personajes en el entorno 3D como los ambientes se ven muy acartonados. Lo cual hace un gran contraste con los diseños en 2D que aparecen cuando hay conversaciones que avanzan la trama del juego. Otro punto a tener en cuenta es el farmeo. Cada vez que entramos a una zona nueva, el juego pega un salto de dificultad que nos obliga a farmear cada vez más para no morir al explorar las zonas. Esto nuevamente trae a colación un punto previamente mencionado, se vuelve monótono.

Llegado cierto punto, las batallas pueden durar de 20 a 30 minutos debido a este problema. Los puzzles suelen estar bien. consisten principalmente en encontrar objetos, abrir cajas fuertes o resolver preguntas para continuar avanzando. Es aquí donde nuestra barra de locura entra en juego ya que, si nos encontramos mucho tiempo dentro de la niebla esta aumentará y si llega al 100 nos desmayamos y despertamos en la enfermería. Si la barra llega a 100 en combates, luego de 3 turnos el personaje que tenga esta barra cargada morirá y si es el protagonista, es game over. Así es, Monark es de esos juegos donde si muere el protagonista se termina el juego.

Sobre la banda sonora, está bastante bien. Los temas de batalla luego de cierto punto se pueden tornar repetitivos pero son muy buenos. Los ost de cada batalla son bastante inmersivos debido a que son canciones con voces que tienen mucho que ver con el enemigo al que nos enfrentamos. Las batallas con los bosses son las mas creativas debido a que ellos utilizan otra mecánica conocida como Awakening o Despertar. Esta nos permite realizar ya sea ataques especiales o realizar ataques sin coste de la barra de locura, además de reducir esta última a cero. Debido a que los bosses también son personas que han realizado un pacto, pueden aprovechar esta mecánica igual que nosotros.

En cuestión de idiomas la cosa bien algo escasa. En voces solamente se encuentra disponible en Inglés o Japonés, siendo esta última un muy buen trabajo de parte de los seiyuus nipones. Por el lado de los subtítulos solamente se puede jugar en inglés. No existe y tampoco está en planes una traducción al español como con la mayoría de juegos de temática anime. No es una sorpresa pero es bueno tenerlo en cuenta si se desea adquirir el producto y no se tiene un conocimiento de inglés. Los publishers de esta clase de juegos deben comenzar a plantearse realizar una traducción al español en sus próximos lanzamientos para no dejar de lado a un sector del mercado que puede estar interesado en el juego.

Monark es un juego que tiene muy buenas ideas, muchas de ellas se ejecutan de forma excelente. El combate arriesgado y gratificante, una atmósfera espeluznante y una historia interesante hacen que este juego sea fácil de recomendar. Sin embargo, cosas como los gráficos de baja calidad, los entornos repetitivos y la inexistente variedad de enemigos evitan que sea un título magistral. Recomiéndo Monark a cualquier entusiasta de los JRPG que busca algo diferente a la norma y a aquellos fanáticos de los juegos de Shin Megami Tensei y Persona de la vieja escuela. Puede que su ejecución no haya sido la mejor, pero Monark es una experiencia que creo que aún vale la pena darle una oportunidad.

Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por NIS America.

 

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