The TakeOver – Nintendo Switch (Análisis)

“The TakeOver” es un divertido homenaje a los clásicos beat em ups de los 90s; ya saben, aquellos que jugábamos solos o con amigos en consolas como la Super Nintendo. Es un género que, curiosamente, ha resurgido últimamente en plataformas como la Nintendo Switch, cobrando vida (por segunda vez) a través de experiencias nostálgicas, pero generalmente, llenas de elementos un poco más modernos, como para que los gamers más jóvenes también la pasen bien. Es un claro ejemplo de lo que puede suceder con géneros que fueron particularmente populares en las épocas de los 8 ó 16 bits: o bien pueden morir para siempre, o como en el caso del beat em up, pueden revivir, al más puro estilo del ave fénix, desde las cenizas.

En todo caso, vale la pena aclarar que “The TakeOver” es un juego que, efectivamente, homenajea a los títulos de antaño, pero que también trae lo suyo propio, como para que no se sienta como una copia barata o un título puramente nostálgico, sin nada novedoso para ofrecer. El producto final, pues, termina siendo increíblemente entretenido, utilizando controles realmente precisos, y combinándolos con gráficas atractivas —pero que también podrían tener sus detractores—, niveles vistosos, un buena cantidad de combos por realizar, y una historia suficientemente interesante, curiosamente escrita por uno de mis YouTubers de videojuegos favoritos, Matt McMuscles. De hecho, fue a través de uno de sus videos que me enteré de la existencia de este juego… ¡publicidad bien hecha, pues!

Como deben saber ya, “The TakeOver” se desarrolla como un clásico exponente del género, llevándose a cabo desde un perspectiva lateral, con personajes que se pueden mover de izquierda a derecha y, en este caso, también de arriba a abajo. Al inicio, uno solo puede escoger de entre tres personajes —eventualmente se desbloquean más—, entre los cuales se encuentra uno de características balanceadas, otro un poco más fuerte y lento, y otra un poco más débil, pero muy ágil. Es una combinación de stats bastante clásica, pero que le permite al jugador escoger el tipo de movimientos que utilizará. Y por supuesto, hace que el modo cooperativo de dos personas se sienta más variado, ya que ningún personaje se parece demasiado al otro.

Los controles no son demasiado complicados, y de hecho fluyen sin mayores problemas, convirtiendo a “The TakeOver” en una de las experiencias más ágiles y frenéticas que haya tenido con el género. Mientras que otros beat em ups se sienten letárgicos y sosos, acá la acción se lleva a cabo de manera rápida y furiosa, lo cual resulta en una experiencia que lo obliga a uno a estar siempre atento. En todo caso, vale la pena mencionar que cada personaje tiene un botón de patadas y otro de puñetes; uno para ataques especiales (como bolas de fuego), uno de salto, y por supuesto, la posibilidad de realizar un mega-ataque especial (como hacer que caiga toda una lluvia de cohetes, acabando con todos los enemigos en pantalla), así como la de llenar una barra de rage, la cual hace que el personaje sea invencible y tenga ataques más fuertes por un tiempo limitado.

Es todo muy variado, y resulta en una experiencia que incita al jugador a realizar diferentes combos, combinando todos los botones disponibles para acabar con los enemigos que pueden llegar a rodearlo. Uno puede saltar y pegar, agarrar a los enemigos para sacarles la mugre mientras los tiene inmovilizados, disparar armas (con balas muy limitadas) con el ZR, y hasta hacer rolls para evitar perder vida. Eso sí; me pasó unas cuantas veces que no me daba cuenta que los enemigos me estaban pegando, ya que mi personaje no demostraba ningún tipo de daño a nivel visual, ni hacía ruido o se quejaba. La barra de vida simplemente bajaba mientras yo seguía jugando y pegándole a los demás. No es un error demasiado grave, pero creo que tener demostraciones un poco más obvias de daño ayudaría a que uno se cuide más de los enemigos.

Y hablando de ellos; “The TakeOver” no comienza como un juego demasiado complicado, pero mientras uno avanza, los enemigos se van poniendo más necios y fuertes. De hecho, llega un punto en el que uno se ve verdaderamente rodeado por ellos, lo cual convierte a “The TakeOver” en una experiencia en la que uno tiene que deshacerse de varios contrincantes a la vez, tratando de utilizar los combos para realizar cadenas de ataque masivas que no le permitan a los villanos siquiera tocar al protagonista. Es una manera muy interesante y francamente divertida de desarrollar el gameplay de un beat em up, haciendo que todo se mueva de manera rápida y frenética. “The TakeOver” no es el beat em up de nuestros abuelos, lo cual es una excelente noticia.

A nivel técnico, “The TakeOver” está bastante bien. El juego se mueve a 60 cuadros por segundo, tanto en el televisor como en la modalidad portátil de la Nintendo Switch, lo cual es genial, considerando que se trata de un título que le exige reflejos de Jedi al jugador. No me encontré con glitches ni errores visuales ni nada por el estilo —el desempeño técnico del juego es igual de fluido que los controles. Por otro lado, las gráficas son extremadamente detalladas y coloridas, haciendo uso de fondos con mucho movimiento y varios elementos destructibles. Eso sí, los personajes en sí son figuras planas de CGI, lo cual hace que luzcan ligeramente noventeros —y no de buena manera, necesariamente. A mi sí me gustó el estilo —y ES un estilo, de eso no hay duda—, pero no me sorprendería si es es que esto le termina por fastidiar a algunos jugadores.

La pasé realmente bien con “The TakeOver”. Sí, hubiera sido genial que incluya modos de juego online —ha pasado más de un año desde que salió el juego, pero todavía no pierdo la esperanza de que los saquen con una actualización—, y sí, resulta fácil distraerse con tanta violencia, haciendo que uno no se de cuenta de que está perdiendo vida. Pero entre los controles súper precisos, el gameplay satisfactorio, los diferentes modos de juego —desde el principal (el de Arcade), hasta los retos y un excelente modo Survival— y las gráficas atractivas (al menos para mí), resulta muy fácil divertirse con “The TakeOver”, olvidándose de sus pocos defectos. Si quieren probar un beat em up que homenajea bien a sus predecesores, pero que también incluye novedades propias, cómprense “The TakeOver” en la eShop de la Nintendo Switch. ¡Los remontará a épocas más sencillas e inocentes!