Sludge Life – Nintendo Switch (Análisis)

20

Sludge Life

$14.99
7.8

Gameplay

9.0/10

Sonido

8.0/10

Controles

6.0/10

Duración

8.0/10

Pros

  • Interesante y novedoso concepto
  • Arte agradable

Cons

  • Control incómodo y tosco
  • Es posible que te pierdas con facilidad

Todos alguna vez hemos tenido la necesidad de hacer volar nuestra mente de diversas maneras a través de los sueños, películas, experiencias, etc para salir de la rutina o por simple placer personal. Justamente el día de hoy nos encontramos con Sludge Life. Una propuesta sandbox en la cual podremos hacer cosas ordinarias de manera extraordinaria.

Sludge Life ha sido desarrollado por Terri Vellmann / DOSEONE y distribuido por Devolver Digital. El juego lanzado para pc en mayo del 2020 llega ahora a Nintendo Switch con una propuesta muy poco común y hasta cierto punto, extraña. Pero… a todo esto ¿Qué impresiones nos ha generado este juego? Veamos lo que nos trae:

El juego muestra desde la pantalla de título, una ambientación inspirada en los años 90, aquellas épocas donde a todo se le quería dar fachada de extremo y espectacular a través de efectos especiales y animaciones bastante toscas.

Tendremos el control en vista de primera persona de nuestro personaje, con él, lo primero que haremos será pintar un grafiti antes de que la curiosidad y las riendas sueltas que te da el juego te lleven a explorar todo lo que hay a tu alcance.

Luego de tu primer grafiti, te quedarán algunas dudas sobre lo que tienes que hacer aquí. Está bien, se trata de explorar e interactuar con todo lo que se te presenta, pero… ¿hasta que punto?

Sludge Life no te dice qué hacer, tampoco cuándo dejar de hacer algo, tal es la libertad que te da este título que la regulación a la misma que te impone el juego no pasa de los momentos en los que lo pauses o dejas en modo de espera a la consola.

 

 

Como se ve en una de las dos capturas anteriores, tenemos la posibilidad de instalar un software en nuestra laptop que nos permitirá jugar en nuestro ordenador. Cabe resaltar que también se puede orinar, saltar, beber refrescos y fumar cigarrillos.

Es cierto que de manera general se puede decir que el mundo que está presente en este título tiene una atmósfera decadente, el juego quiere que te des cuenta de esto, del mensaje que te quiere dar a través de las pequeñas conversaciones que puedes mantener con los otros humanos presentes.

Ahora bien, pasando al lado técnico sí tenemos una característica que nos incomoda: el control. Es cierto que de alguna manera el juego nos quiere dar la impresión de que en el ambiente que propone nada importa mucho por lo que puedes llegar a realizar y la libertad dada, pero aun así el sistema de control resalta por lejos como lo menos logrado del título.

Los movimientos resultan toscos, más de una vez experimentamos caídas que, con un control más afinado, se hubieran podido evitar fácilmente. Tal como lo que pasaba en los juegos de disparos que aparecieron a inicios de siglo. Es así como el control dificulta la inmersión que te quiere dar la atmósfera que visitamos al probar el título.

Si bien es cierto el juego no te recuerda a cada momento lo que tienes que hacer, sí existen algunos objetivos, encontraremos, por ejemplo, una cabina de transporte para ir de manera rápida a algunos puntos del mapa. Además, el juego te incita a dibujar grafitis en ciertas zonas como forma de cerciorarse la exploración que estás llevando a cabo.

En muchas partes nos sentiremos identificados con nuestra cultura, nuestro día a día (tal vez ignorando un poco la pandemia) pues se muestran situaciones cotidianas como huelgas, Street Dance, personas sin tomarse en serio su trabajo, personas que han perdido la motivación, entre otros.

Así, el arte de estilo urbano y el mensaje que te transmite el juego son las dos mejores cartas de presentación de este, poniendo las bases de la identidad del juego que, a su vez se complementa con los diálogos y acciones de los NPCs. En Sludge Life encontramos un ambiente construido en base a colores muertos que curiosamente, resulta bastante vivo, aunque como dijimos antes, decadente.

Conclusión

Sludge Life es una propuesta fuera de lo normal que te hará indagar (como en la vida real) tu verdadero propósito a través de las experiencias que vayas obteniendo en tu entorno. Si bien es cierto la inmersión al título se ve obstaculizada por el control, bastará con poco tiempo de juego para que puedas interiorizarlo. Por otro lado, el mayor logro de este título es su identidad, única e interesante nos lleva a una especie de barrio promedio de manera caricaturizada rozando la parodia sin ser de mal gusto o exagerada.

En conclusión, haciendo una analogía con el arte. Sludge Life es a los videojuegos lo que el arte urbano es al arte, realmente se esfuerza por hacer que te intereses en él y dejarte un mensaje.

 

Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por Devolver Digital.



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