Slime-San
$11.99
Pros
- Ágil y dinámico
- Rejugabilidad
- Diseño de personajes
Cons
- Soundtrack escaso
- No multijugador aventura
Llega a Nintendo Switch un juego bizarramente tierno. Desarrollado por Fabraz, Slime-San es una plataforma que nos llevará a descubrir las entrañas de un enooooorme gusano. Aquí les dejamos nuestro análisis:
El argumento de Slime-San parece haber sido extraído del cuento de Pinocho, donde nuestro amigo hecho de madera es tragado por una ballena y debe encontrar la forma de salir. En este caso no somos un títere, si no un slime (del tipo de masa deforme que se puso de moda por un tiempo), y tampoco estamos dentro de una ballena, sino de un gusano.
Así se presenta Slime-san, con una historia no muy complicada, pero que guarda un juego bien hecho en su interior. Además del simpático slime encontraremos personajes bizarros y divertidos, como un pequeño pájaro que se posa en nuestro mucoso cuerpo y que nos acompañará en nuestra aventura.
De alguna u otra manera Slime-san guarda similitud con Super Meat Boy. Sin embargo, hay pequeñas (pero notables) diferencias que los hacen distintos.
El reto aquí es llegar al otro lado del mapa para poder salvarte. No obstante, no podrás sentarte a pensar el camino, porque tendrás solo unos segundos antes que un líquido rojo mortal (el ácido estomacal) comience a invadir toda la pantalla. No temas a lanzarte y morir en el intento, ya que solo así podrás hallar la ruta correcta. Deberás ser rápido y evitar quedarte pegado en un lado por mucho tiempo.
Durante tu paso por el cuerpo de este insaciable gusano, se irán presentando nuevos retos. Para enfrentarlos solo contaremos con dos movimientos: hacernos intangibles al color verde y realizar un dash para ir más rápido. Ojo, en este juego NO podremos eliminar a nuestros enemigos, así que la clave queda en saber esquivarlos.
Sorprende que un juego indie ofrezca tanto contenido con un precio relativamente cómodo. Además de la aventura principal se ha incluido minijuegos, aportando así una mayor rejugabilidad, ya que se habilita el multijugador. Asimismo, hay una opción Speed Running, perfecta para quienes desean batir tiempos y lucirse ante los demás.
Slime-san presenta un soundtrack escaso, pero bien trabajado. Entre niveles se escucharán siempre las mismas dos o tres pistas, a excepción de los jefes donde el ritmo se hace más frenético. Ello juega en contra del título, ya que así los niveles se hacen algo repetitivos, musicalmente hablando.
Sobre el estilo gráfico, Fabraz ha acertado en escoger la paleta de colores para Slime-san. Siempre serán rojo-verde-azul y blanco, logrando así un amalgama extrañamente simpático. Este apartado calza bien con los personajes, que parecen haber aceptado su destino y han formado una ciudad dentro del cuerpo del gusano.
Sin duda el mejor juego hecho por Fabraz hasta ahora. Slime-San es un juego fresco, que ha cogido un concepto no tan original, pero que lo ha hecho único. Aunque tiene algunas carencias, el título vale la pena comprarlo.
Se extraña un poco que no exista un multijugador para la aventura principal, pero a veces los retos debemos enfrentarlos solos. La desarrolladora ha anunciado que continuará dándole mayor soporte gratuito al juego, así que hay contenido para rato.
Slime-San ya está disponible en la eShop de Nintendo Switch a 11.99 dólares americanos.
Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por Headup Games.
