¡Esto sí que es difícil! Siendo The Legend of Zelda mi franquicia favorita de Nintendo, elegir los PEORES juegos de todos no es tarea fácil. Y esto no es solo porque le tengo un particular cariño a estos títulos; es, también, porque siendo justos, y al igual que en el caso de Super Mario, realmente no han hecho juegos terribles. Sí, algunos son mejores que otros, y otros no han aguantado bien el paso del tiempo, pero de ahí a que sean verdaderamente malos… no realmente.
Sin embargo, esta es mi tarea del día, así que con el dolor de mi corazón, les presento lo que en verdad vendrían a ser los 5 juegos “menos buenos” de The Legend of Zelda.
Ah, y no estoy incluyendo los juegos para el CD-i porque… bueno, “tampoco tampoco”, pues, ¿no?
5. The Legend of Zelda: Four Swords
The Legend of Zelda: Four Swords merece estar acá no porque sea un juego terrible, si no porque es una distracción temporal de 3 ó 4 horas de duración, más que una aventura bien desarrollada. Por algo decidí no incluir el Four Sword Adventures para GameCube: a pesar de no ser nada del otro mundo, se siente como algo un poco más desarrollado. La versión para Gameboy Advance, sin embargo, fue incluida como un adicional en el port de A Link to the Past por algo: no justificaría una salida como juego individual. El concepto es interesante —y ha sido mejor explotado posteriormente—, pero definitivamente pudo tener más contenido.
4. The Legend of Zelda: Spirit Tracks
Spirit Tracks no es un juego terrible, para nada. De hecho, mejora varios de los defectos más aparentes en su predecesor, Phantom Hourglass. No obstante, igual sigue siendo una decepción si se le compara con los juegos principales de la saga. Los viajes en tren son tediosos y demasiado largos, incluso más aburridos que los del bote en Wind Waker —¡y eso que yo no tengo ningún problema con Wind Waker!—, y la inclusión de elementos de exploración está realizada a medias, por lo que la experiencia en general resulta poco satisfactoria. Hay buenos elementos —mazmorras, personajes, y todo el apartado gráfico— pero para estándares de Zelda, no son suficiente.
3. The Legend of Zelda: Phantom Hourglass
Lo cual nos lleva a Phantom Hourglass, por supuesto. Si Spirit Tracks es divertido sin ser nada especial, Phantom Hourglass es mucho más fallido. Los controles de movimiento funcionaron muy bien en Skyward Sword —si los sabes utilizar, por supuesto— pero la dependencia de controles touch en Phantom Hourglass juega en contra de la experiencia en general. Súmenle a esto el infame templo de Ocean King, y el juego simplemente no llega a ser tan entretenido, memorable y complejo como otros títulos de la saga. Para estándares de juegos para plataformas portátiles no está del todo mal… pero para estándares de The Legend of Zelda, definitivamente decepciona.
2. Zelda 2: Adventure of Link
Hay que darle crédito donde es necesario: Zelda 2: The Adventure of Link trató de hacer las cosas de diferente manera, sin tratar de replicar el genio del primer título de la saga. No le salió tan bien como a juegos posteriores como Majora’s Mask o The Wind Waker, pero la intención es honorable. No obstante, hay que admitir que se trata de un título injustamente difícil y complejo, el cual resulta imposible de terminar sin la ayuda de algún tipo de guía. Además, sirve como ejemplo de que el gameplay cenital —o posteriormente, en mundos 3D— es perfecto para la saga, ya que esta propuesta 2D tradicional no terminó de convencer. Zelda 2 es un animal distinto; difícil, obtuso, pero para aquellos que disfrutan de los retos, digno de ser probado.
1. The Legend of Zelda: Tri Force Heroes
The Legend of Zelda: Tri-Force Heroes es uno de los pocos juegos de la franquicia que nunca me animé a comprar…. eso debería decirles todo sobre la calidad del título, especialmente teniendo en cuenta que me considero como un gran fanático de la saga. Sí lo he probado, evidentemente, y es por ello que, muy a mi pesar, lo tengo que incluir en el primer puesto de esta lista. Se trata de un juego con poca historia y un gameplay medianamente interesante, que definitivamente palidece en comparación de los otros juegos de Zelda. Y por supuesto está lleno de decisiones inexplicables, como el hecho de que solo se puede jugar de máximo tres personas… ¿por qué no cuatro, que sería lo lógico? Quién sabe. En todo caso, si deciden jugarlo solos, termina siendo una experiencia incluso más sosa, por lo que solo le recomendaría el juego a aquellos que sepan que pueden jugarlo con amigos todo el tiempo. Es por todo esto que, para mi, The Legend of Zelda: Tri-Force Heroes es el peor juego de Zelda hasta el momento.
Lo siento, Link
Como se deben haber dado cuenta, ninguno de estos títulos es malo. Es más, hasta el primer puesto es sorprendentemente decente. Al igual que cuando escribí sobre los peores juegos de Super Mario, el problema principal de estos juegos no es que sean injugables, si no que sufren en comparación a las obras maestras que han salido para la saga. Por lo que si han jugado ya los mejores títulos de Zelda, valdría la pena probar estos de todas maneras.
Para dentro de dos semanas: tocaremos un franquicia de Nintendo bastante más futurista….