Bob Help Them! – Nintendo Switch (Análisis)

Pues estoy comenzando a pensar de que el nombre “Bob” está relacionado a actitudes positivas o algo amigable y de confianza; claro, tenemos ejemplos, sin ir lejos, del clásico Bob Esponja y su manera naturalmente despreocupada de concebir la vida; Bob Ross, aquel pintor paisajista de innumerables artilugios que nos decía que la equivocación no era tal, sino algo como un “error feliz”; también Bob El Constructor que nos regaló innumerables memes que alegran el día… El nombre Bob, entonces, es sinónimo de que algo bueno va a ocurrir, quizás no necesariamente verdadero, pero si feliz: un sinónimo de utopía.

Bob Help Them! Es un video juego que, como se mencionó líneas atrás, es una utopía, una utopía en el plano vivencial. Nosotros nos veremos representados en la figura de Bob, un habitante común y corriente pero con un sentido de altruismo tan grande que se pone a hacer las tareas de toda la comarca donde vive, y todas las tareas como recolectar frutas, ponerse a pescar y hasta ir en busca de oro y no escribo de más tareas para que el factor sorpresa no se pierda: en fin, todo lo que Bob puede hacer para ayudar a los demás, simplemente lo hace y sin preguntar. Sí, es un Bob “Esperancito”, como dirían en estos tiempos modernos.

La dinámica del juego es simple; se trata de la eficacia: realizar mayor productividad en el menor tiempo posible. Para ello estaremos contra reloj mientras cumplimos con nuestros objetivos que es hacer feliz a cada uno de los personajes de la comarca. Los hay desde recolectores de frutas, leñadores y hasta perritos en busca de caricia; cada uno nos pedirá ciertos elementos, ya sea en su estado natural o para poder transformarlos, y conforme vayamos avanzando de nivel, mayor será la demanda y el número de ciudadanos “flojos” a quienes debemos socorrer.

En cuanto a la jugabilidad, Bob Help Them! podría resultar al principio algo confusa, pero conforme vamos avanzando las tareas y el modo de hacerlas podrían presentarse de manera natural, sin olvidar la dosis de adrenalina que supone realizar las tareas mirando el reloj hacia atrás. Sin embargo aquí se observa de manera marcada el tema de “ensayo y error” y el factor memorístico que supone aprender la ruta de las tareas a realizar para que estás puedan realizarse no en el menor tiempo, sino aprovechando el mayor tiempo posible.

Los gráficos de este video juego resultan de lo más tierno, de aquellos que nos recuerdan los de estilo NES y SNES con juegos como Zelda, por ejemplo, o el mismo Pokémon: una invitación a la nostalgia. La música quizás pueda parecer repetitiva, pero el hecho de estar con el cerebro disparado a mil por cumplir las tareas en el menor tiempo posible y sin que nos venza el reloj hará que nos de igual si la música es una tormenta de bocinas o el silencio más sepulcral.

Como conclusión y comentarios finales de este video juego. Se menciona que es un juego educativo; no quiero ir al debate acerca de si la educación es impositiva o no, pero si quiero recalcar que este juego comparte experiencias, experiencias que van desde lo trabajoso y laborioso que es la tarea en el campo, así como de lo hermoso que es poder ayudar tan solo porque nos nace hacerlo, porque en la sonrisa del otro vemos reflejados la nuestra, porque formamos parte de un todo llamado común-unidad, y ese todo es todo lo que hay.

Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por No Gravity Games

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