Aerial_Knight’s Never Yield – Nintendo Switch (Análisis)

“Aerial_Knight’s Never Yield” es uno de esos juegos de los que se sabía poco…. hasta que fue mostrado en uno de los famosos Indie Directs de Nintendo. Es ahí que me interesé más en este título, desarrollado solo por Neil Jones “Aerial_Knight”, quien comenzó a crearlo únicamente como una suerte de proyecto personal. Evidentemente, el juego creció, hasta convertirse en lo que tenemos hoy en día, un título disponible en la eShop de la Nintendo Switch para que miles de personas lo puedan probar. Este es uno de esos casos que ponen en evidencia la manera en que las tiendas digitales han democratizado el desarrollo de videojuegos hoy en día —títulos que años atrás jamás hubieran podido encontrar un público —ya sea por falta de recursos, dinero o tiempo— ahora pueden brillar y hasta aparecer en la web juntos a producciones millonarias de empresas como EA o la misma Nintendo.

Lo que más me llamaba la atención de “Aerial_Knight’s Never Yield”, sin embargo —al ver el trailer en la ya mencionado Indie Direct— fue su estilo. Si, endless runners hay por montones en diferentes tiendas virtuales de videojuegos, pero lo que separaba “Aerial_Knight’s Never Yield” de otros juegos de similar corte era la estética y la música que estaba utilizando. Su creador ha querido inyectarle elementos de una cultura que no siempre es representada en medios como los videojuegos, situando la historia en un Detroit futurista que luce más como Tokio, poniendo de protagonista a un chico afroamericano recontra ágil, que quiere descubrir la verdad sobre lo que está sucediendo en su ciudad. Es un tipo de juego, pues, que no se ve con frecuencia, por más de que utilice mecánicas que han sido utilizadas ya —de otras maneras— en producciones más antiguas.

Evidentemente “Aerial_Knight’s Never Yield” tiene buenas intenciones, pero de buenas intenciones no están hechos los juegos, por lo que es válido hacerse la siguiente pregunta: “¿Vale la pena jugar Aerial_Knight’s Never Yield?” Pues… sí, pero hasta cierto punto. Lo que tenemos acá es un endless runner con muy buenas ideas y, como ya di a entender líneas arriba, un estilo muy propio muy vistoso, que sin embargo sufre de algunos problemas de control que evitan que se convierta en un verdadero clásico. No me tomen a mal; no es un mal juego para nada, y considerando que fue hecho por una sola persona, se trata de un esfuerzo verdaderamente impresionante, pero a la vez, no puedo evitar pensar que si le daban una poco más de tiempo a Jones, hubiera sido capaz de entregarnos una experiencia un poco mejor pulida y menos frustrante.

El concepto es sencillo: uno controla a Wally, quien corre automáticamente a través de distintos niveles llenos de obstáculos. Para ayudarlo a realizar diferentes movimientos, uno solo tiene que utilizar la cruz direccional (o el stick izquierdo); ¡el juego no utiliza ningún otro botón! Si uno presiona Arriba, Wally dará un salto alto; si presiona Abajo, hará una barrida rápida agachado; si presiona Izquierda, hará un salto mediano, y si presiona Derecha, hará un dash para correr más rápido. No es un sistema para nada complicado, y de hecho está muy bien explicado en el prólogo del juego, en donde se utilizan gráficas son símbolos de la Cruz Direccional, para dejar bien en claro qué tipo de movimientos puede hacer Wally, y cómo.

El chiste del juego, entonces, está en atravesar los distintos niveles utilizando los movimientos ya mencionados de manera apropiadas, tratando de morir lo menos posible, y enfrentándose a diferentes Jefes de cuando en cuando. Lo interesante es que hasta los Jefes utilizan estas mismas mecánicas, por lo que, en efecto, lo que uno aprende en el prólogo… es lo que terminará haciendo por el resto del juego, hasta el final. Y si eso suena un poco repetitivo, es porque lo es. Por más de que “Aerial_Knight’s Never Yield” sea un título extremadamente estilizado, hacia el final ya se me hacía algo redundante, obligándome a hacer lo mismo una y otra vez, con una que otra variación mejor. Felizmente el juego entero puede ser pasado en 1 hora y media (o menos), con el único incentivo para volver a jugar siendo las dificultades mayores (que son desbloqueadas al inicio).

La dificultad Normal es suficientemente retadora, pero las otras dos modifican el tipo de obstáculos que uno se encuentra y los avisos que el juego le muestra para indicarle al jugador qué movimiento tiene que hacer en qué momento, lo cual estoy seguro incitará a los gamers más “afanosos” a jugar una y otra vez. Y aunque normalmente estoy también me motivaría a mí… ese, desgraciadamente, no fue el caso en “Aerial_Knight’s Never Yield”. Como mencionaba líneas arriba, se me hizo demasiado repetitivo, por lo que al terminar mi primera partida (en dificultad Normal) no tenía muchas ganas de volver a jugar, por más de que me faltasen algunos outfits por desbloquear (los cuales son conseguidos luego de jugar bien en cada nivel).

Tampoco ayuda, además, el que “Aerial_Knight’s Never Yield” cuente con algunos problemas de control. En pocas palabras, se trata de un juego que le exige mucha precisión al jugador, por lo que uno esperaría que el juego en sí fuera igual de preciso… pero ese no es siempre el caso. Me pasó algunas veces que el juego no registraba bien mis movimientos, o confundía a uno por otro (y si uno hace un salto medio en vez de un salto alto para esquivar un obstáculo particularmente grande, simplemente morirá), o hasta me mataba, a pesar de que claramente esquivé el obstáculo con éxito. Esto último es particularmente fastidioso, porque “Aerial_Knight’s Never Yield” es un juego en donde los movimientos que uno tiene que realizar en ciertos obstáculos no siempre son los más lógicos; hay veces donde claramente lograba saltar encima de una pila de cajas o una mesa con un salto mediano, pero como el juego está programado para aceptar únicamente un salto alto, igual me mataba. Se siente injusto, y lo obliga a uno a recurrir al clásico ensayo y error.

Lo cual es una pena, porque fuera de eso, se trata de un sólido endless runner, con una trama simplista pero bien contada, y hasta cinemáticas vistosas, generalmente al inicio de los niveles, o antes de enfrentarse a los Jefes. Las gráficas son coloridas y muy estilizadas, y la variedad de enemigos y obstáculos es considerable; tenemos desde carros que salen volando o se chocan, hasta drones, minas, muebles de oficina, rampas, rejas, ventanas, y puertas que, para ser atravesadas, lo obligan a uno a hacer el dash por varios segundos. Los niveles lucen todos muy bien, y aunque me encontré con un par de ralentizaciones del framerate —más que nada durante las transiciones entre escenas o pantallas—, nunca fue nada demasiado grave. Nuevamente; considerando que “Aerial_Knight’s Never Yield” fue hecho por una sola persona, es increíblemente ambicioso (o quizás demasiado ambicioso).

Eso sí, sobre la banda sonora no tengo queja alguna. Toda la música fue compuesta por un artista llamado “Danime-Sama”, quien logró insertar canciones llenas de groove, con harta influencia del funk y hasta un poco de jazz, utilizando varias trompetas y saxofones para darle un feeling urbano pero muy estilizado al juego. La música es simplemente pegajosa, y complementa a la perfección a la atmósfera desarrollada por el estilo gráfico del juego. De hecho, me resultaba prácticamente imposible no mover mi cabeza al ritmo de la música mientras pasaba cada nivel (por más de que de rato en rato me frustraba con las características más injustas dei gameplay). Ciertamente se trata de una banda sonora que escucharé con frecuencia en Spotify.

Sí, “Aerial_Knight’s Never Yield” es un juego fallido, que definitivamente debió ser mejor de lo que terminó siendo. Es frecuentemente injusto, tiene problemas del input del control, y obviamente es corto… pero a la vez, se siente como un proyecto de pasión, hecho por alguien que quería entregarnos un mundo que nunca antes se ha visto en un videojuego. “Aerial_Knight’s Never Yield” tiene muy buenas ideas, pues, y aunque no siempre las desarrolla bien, igual resultan en una experiencia tanto frustrante como entretenida. Puede que ya hayan jugado endless runners antes… pero estoy (casi) seguro que nunca han jugado uno como este. Ojalá arreglen los problemas ya mencionados de “Aerial_Knight’s Never Yield” en algún parche en el futuro; si lo hacen, se convertiría en uno de los títulos más recomendables y adictivos de la Nintendo Switch.

Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por Headup Games.

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