- Vao a Taiwan.
“The Legend of Tianding” es un juego de acción bastante satisfactorio que, a pesar de tener algunos defectos considerables —especialmente relacionados al ritmo en el que ese lleva a cabo—, logra satisfacer con un estilo visual impresionante y un excelente sistema de combate. Lo más impresionante del juego, sin embargo, está en el contexto en el que se lleva a cabo; no es ningún secreto que hay varios estilos narrativos o locaciones que se ven con mucha frecuencia en el mundo de los videojuegos, por lo que experimentar una historia que, al menos, se siente diferente, definitivamente a que uno la disfrute más.
“The Legend of Tianding” se lleva a cabo a principios del siglo pasado en Taipei, la capital de Taiwan. Uno controla a Liao Tianding, un criminal legendario, cuya vida es narrada a lo largo de varios capítulos. Uno termina encontrándose con todo tipo de personajes, interactuando con ellos, haciéndoles favores, y por supuesto, peleando contra ellos. No se trata de una narrativa fascinante, pero que sin embargo se siente algo original precisamente porque no hemos tenido demasiados juegos que se lleven a cabo en este contexto en el pasado. Ser testigo de eventos que ocurren en un mundo tan palpable y detallado termina siendo muy divertido, especialmente considerando que Taiwan no ha sido tan representando en el mundo de los videojuegos como otros países o culturas.
Ahora bien, el juego se desarrolla como una suerte de Metroidvania, pero con un mayor enfoque en el combate que en la exploración. Los niveles son bastante variados aunque algo lineales, obligándolo a uno a pelear contra varios enemigos con frecuencia, incluyendo uno que otro lugar aparte para explorar muy de vez en cuando. Hay varias arenas, calles, pasadizos, interiores y más, los cuales además ayudan a contextualizar la historia de manera efectiva. Se nota que los desarrolladores se esforzaron para que la narrativa sea coherente con el gameplay y el diseño de los niveles, haciendo que la experiencia en general se sienta cohesiva.
Como ya se dio a entender, sin embargo, lo más interesante de “The Legend of Tianding” es el sistema de combate. Básicamente, casi desde un inicio, el juego incita al gamer a utilizar diferentes movimientos para robarle armas a sus enemigos, haciendo que pueda atacarlos con sus propias espadas o machetes o pistolas. Súmenle a eso las diferentes habilidades con las que uno cuenta (como esquivar o saltar), y la agresividad de los enemigos —en cualquiera de las dificultades, la verdad—, y “The Legend of Tianding” se torna rápidamente en una experiencia rápida y furiosa, en la que uno tiene que utilizar sus rápidos reflejos para poder sobrevivir.
Adicionalmente, tenemos a los jefes finales, los cuales aparecen al final de cada capítulo. Estos son increíblemente retadores, tanto así que estoy seguro varios jugadores terminarán enfrentándose a ellos una y otra vez, hasta que los derroten. Ahora bien, esto suena potencialmente frustrante, pero una de las mejores características de “The Legend of Tianding” es que nunca llega a sentirse injusto, haciendo que el jugador se de cuenta que está perdiendo debido a sus propias falencias, y no porque el juego tenga una dificultad irregular, o incluya situaciones imposibles de predecir. De hecho, uno termina utilizando todas sus habilidades a la hora de enfrentarse a estos jefes, lo cual resulta en una satisfacción increíble una vez que son derrotados.
A nivel técnico, tengo pocas quejas de “The Legend of Tianding”. La estética general del juego es bien de anime, haciendo uso de colores vibrantes y líneas bien definidas, así como de diseños memorables, para otorgarle un estilo muy particular a la experiencia. Los cutscenes, incluso, hacen uno de diseños inspirados en manga, lo cual se siente coherente con la experiencia durante los momentos interactivos. Sin embargo, el mayor defecto de “The Legend of Tianding” está precisamente en dichos cutscenes: son demasiado extensos —especialmente al inicio de cada capítulo—, haciendo que uno se desespere y hasta termine salteándolos, para llegar directamente a la acción. Entiendo que los desarrolladores estaban intentando generar una atmósfera palpable para el juego, estableciendo bien el contexto (anteriormente mencionado) en el que se lleva a cabo, pero creo que se les pasó un poco la mano.
En términos generales, “The Legend of Tianding” es el tipo de juego que debería apelar a los fanáticos de la acción. Sí, es bastante lineal, y sí, el ritmo no es el mejor, ya que abusa un poco de los cutscenes y de las interacciones algo sosas con los personajes no jugables, pero cuando uno se adentra en el combate y, especialmente, los enfrentamientos con los jefes, se encuentra con una experiencia muy bien construida, con un sistema de batalla increíblemente satisfactorio. Los controles responden bien, las gráficas son atractivas, y el desempeño técnico, sin ser perfecto, no cuenta con fallas mayores. “The Legend of Tianding” se siente distinto sin ser la experiencia más novedosa del mundo, y debería otorgarle varias horas de diversión y reto tanto a los jugadores más experimentados, como a los neófitos.
Este análisis fue realizado con un código de descarga para la eShop de Nintendo Switch brindado por Neon Doctrine.
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